La pareja son dos personas que proceden de familias distintas que se vinculan afectivamente para compartir un proyecto común. Y en este camino, se van enfrentando a distintas etapas enamoramiento, compromiso, convivencia, maternidad/paternidad, crianza, jubilación… Muy a menudo, la transición de una etapa a otra no es nada fácil y se nos complica con problemas como crisis económicas, mudanzas, pérdida de familiares o amigos, cambios de trabajos, disminución del apetito sexual, que ya de por sí son estresores que repercuten en la convivencia y en el bienestar de la pareja, surgiendo crisis puntuales en las que se necesita mejorar la comunicación, gestionar las emociones surgidas para resolver los conflictos que vayan surgiendo.
Las personas que acuden a terapia buscan básicamente resolver una crisis puntual, solucionar problemas arrastrados desde hace años, ayuda en momentos difíciles, consejo para tomar decisiones importantes o simplemente mejorar la relación y crecer juntos. A veces el querer tener razón pasa por querer ser feliz y eso nos dificulta el acercamiento a la otra persona. Los encuentros consisten en una serie de sesiones presenciales o bien online, en las que los dos miembros de la pareja, junto conmigo, buscan la forma de afrontar y resolver todo aquello que está impidiendo que la relación avance. El objetivo principal es lograr que la relación sea sana y siga siendo una fuente de apoyo, de confianza y de bienestar.